Ante el Estado de alama: el CCU, Consejo de Consumidores y Usuarios , pide que las medidas de alarma hagan compatible la prioridad de la salud pública con el respeto a los derechos adquiridos por los usuarios. Devolución de cantidades adelantadas, vigilancia de los precios, garantía del abastecimiento, moratoria en determinados pagos y obligaciones y ayudas especiales para la población vulnerable son sus principales reivindicaciones.
En una reunión telemática mantenida por los vocales del Consejo de Consumidores y Usuarios y el presidente del mismo, Carlos Ballugera, con el Secretario General de Consumo, Rafael Escudero, y la Directora General de Consumo, Bibiana Medialdea, los representantes de las diferentes organizaciones han coincidido en subrayar la importancia de ofrecer a la ciudadanía información clara y accesible sobre los derechos que les asisten ante las diferentes situaciones que pueden producirse con motivo de la crisis provocada por el COVID-19.
Entre las principales peticiones de las asociaciones de consumidores y usuarios figura la devolución de las cantidades económicas aportadas por los ciudadanos para la contratación de viajes, alojamientos, celebraciones, asistencia a eventos u otros supuestos con motivo de la anulación de los mismos.
El CCU propone explorar las posibilidades que otorgan para esa recuperación del dinero adelantando las razones de fuerza mayor y el principio «rebus sic stantibus» en un momento en el que las condiciones de prestación y disfrute del servicio se ven imposibilitadas.
Las asociaciones han hecho también hincapié en otros aspectos clave como la necesidad de adoptar medidas que garanticen el abastecimiento y reparto de mercancías, incluyendo determinadas directrices de flexibilización que faciliten dicho abastecimiento.
La actuación rápida y eficaz en caso de observarse practicas abusivas en el precio de algunos artículos, aplicando las sanciones que correspondan.
La moratoria en materia de fiscalidad, tributos, hipotecas, lanzamientos, especialmente en relación a la población más vulnerable. La garantía de no interrupción de los servicios básicos y la supeditación de los sectores de oferta privada a los principios de interés general, aunando e integrando la prestación de servicios sanitarios tanto públicos como privados. La adopción de medidas de ayuda y compensación en favor de las familias y personas consumidoras que ven interrumpidas sus actividades laborales por las circunstancias extraordinarias de la pandemia. La salvaguarda de sus datos personales.
El CCU ha trasladado a los representantes del Ministerio de Consumo la necesidad de mantener una estrategia de comunicación coordinada con las asociaciones y los ministerios de Sanidad y Consumo para evitar los rumores y la desinformación, garantizando la información unificada y la atención al cliente (especialmente en los teléfonos de atención sobre el coronavirus), y estableciendo un canal que haga llegar a la Administración las quejas y denuncias de los ciudadanos, permitiendo la rápida reacción de las autoridades.
El Consejo señala, en este sentido, que las asociaciones de consumidores y usuarios se mantienen operativas y vigilantes y en modo alguno cesan su actividad, adaptándose a las circunstancias establecidas en el Estado de Alarma, e insta a los ciudadanos a contactar con ellas a través de sus respectivas páginas web, a las que puede accederse desde el propio portal del CCU: Por ello plantean también la posibilidad de mantener en el ámbito virtual las actividades de arbitraje en beneficio de los usuarios.