Coca-Cola se hace con la cadena de cafeterías Costa (Whitbread ) por 4.360 millones de €

Coca-Cola ha comprado la segunda mayor cadena de cafeterías del mundo, Costa, a la británica Whitbread por un total de 3.900 millones de libras (unos 4.360 millones de euros). Coca-Cola ha abierto un nuevo frente en su hasta ahora tradicional negocio de refrescos con la adquisición de Costa, la mayor cadena de cafeterías de Reino Unido y la segunda del mundo (sólo por detrás de Starbucks).

Whitbread ha indicado en un comunicado que esta compra, se cerrará en la primera mitad de 2019, permitirá a Coca-Cola operar cerca de 4.000 cafeterías, 2.400 en Reino Unido y más de 1.400 en una treintena de países. Asimismo, operará las 8.000 máquinas expendedoras de Costa en ocho países, así como un negocio mayorista y de distribución de café a domicilio. La oferta de Coca-Cola ha sido aceptada por unanimidad por el consejo de la británica Whitbread, que ha destacado el beneficio que supone para sus accionistas.

Whitbread compró Costa en 1995 por 19 millones de libras cuando tan sólo tenía 39 establecimientos. Con esta venta Whitbread podrá reducir su deuda, contribuir a su fondo de pensiones, así como expandir su cadena hotelera Premier Inn en Reino Unido y Alemania.

Coca-Cola trata de focalizar su negocio más allá de las bebidas gaseosas hacia opciones más ‘saludables’ para los consumidores. «Las bebidas calientes son uno de los pocos segmentos donde Coca-Cola no tiene una marca global», ha indicado el consejero delegado de Coca-Cola, James Quincey. Esta cadena de cafeterías cuenta con una creciente presencia en China y otros mercados con diferentes formatos, y potencial para expandirse a través del ecosistema de Coca-Cola.