Toscani falleció este lunes en Cecina, Italia, a los 82 años tras unas complicaciones de su amiloidosis
Toscani alcanzó la fama mundial gracias a sus campañas para la marca United Colors of Benetton, en las décadas de 1980 y 1990
Oliviero Toscani, fotógrafo y diseñador italiano, ha fallecido este lunes en Cecina, Italia, a los 82 años antes unas complicaciones de su amiloidosis, enfermedad que había hecho anunciado en una entrevista del pasado mes de agosto .
Nacido en Milán el 28 de febrero de 1942, Toscani alcanzó la fama mundial gracias a sus campañas para la marca United Colors of Benetton, en las décadas de 1980 y 1990. Sus fotografías rompieron tabúes y generaron polémicas tratando desde el sida hasta el racismo, usando imágenes que no dejaban indiferente a nadie. Un estilo crudo y provocador que llevó a Benetton a ser una de las marcas más reconocidas globalmente, tanto por sus productos como por su enfoque social.
Toscani también fue responsable de campañas para grandes marcas como Esprit, Valentino, Chanel y Fiorucci, y ganó ganó múltiples reconocimientos, como cuatro premios Lion d’Or en el Festival de Cannes.
Además Toscani fue fundador de Colors, una revista vinculada a Benetton que exploraba temas de diversidad cultural y social, y de Fabrica, centro de investigación sobre comunicación artística en colaboración con el arquitecto japonés Tadao Ando.
El fotógrafo de la anorexia de la modelo Isabelle Caro
En 2007, volvió a estar en el centro de la controversia con una campaña para la firma Nolita, donde retrató a la modelo Isabelle Caro, conocida por padecer anorexia, en una fotografía que buscaba visibilizar los peligros de este trastorno.
El pasado 10 de enero, Toscani fue ingresado en estado grave en un hospital de Cecina debido a la amiloidosis que padecía. Tres días después, falleció rodeado de su familia.
Referente de la crítica social a través del arte
Conocido por desafiar lo políticamente correcto, Toscani dejó un legado que trascendió el ámbito de la fotografía para convertirse en un referente de la crítica social a través del arte. Su trabajo sigue siendo objeto de estudio en universidades y escuelas de comunicación de todo el mundo, donde se analizan sus campañas como ejemplos de cómo la publicidad puede ir más allá del marketing para generar impacto cultural.
Toscani eligió siempre incomodar, hacer pensar y debatir”, y su final es el final de una era, que deja abierta la puerta para que su visión siga inspirando a nuevas generaciones.
Descanse en paz.