Tras casi un mes de intensa actividad, Esteban Crespo ha finalizado en Los Ángeles la promoción de su trabajo ‘Aquel no era yo’, único representante del cine español en la 86ª edición de los Óscar este domingo y que aspira al premio al Mejor Cortometraje de Ficción. Una labor de promoción que ha contado con la colaboración de Campofrío animando y apoyando al equipo de ‘Aquel no era yo’ tanto en Los Angeles como en Madrid a la hora de congregar y esperemos que celebrar, un nuevo triunfo del director y guionista madrileño, para ¡que nada ni nadie nos quite nuestra manera de disfrutar…. del cine!. De esta manera, Campofrío se suma a la labor de apoyo al talento español fuera de nuestras fronteras que ha necesitado de proyecciones especiales, presentaciones y fiestas para dar a conocer este cortometraje que sueña con alzarse con la codiciada estatuilla.
“Me gustaría agradecer la colaboración de todas las instituciones y ONG’s que han apoyado el corto desde el principio, así como la de Campofrío en estas semanas de promoción en Estados Unidos”, asegura el director madrileño, quien ha calificado a esta nominación como “el colofón a un recorrido extraordinario de este corto que se estrenó hace dos años”. Aquel no era yo ganó el Goya al Mejor Cortometraje en la edición de 2013; el premio al Mejor Cortometraje, Director y Actor (Gustavo Salmerón) en el Festival de Málaga de 2012; y ahora busca el Óscar junto a otros reconocidos trabajos internacionales como Avant que de tout perdre, del francés Xavier Legrand; Helium, del danés Anders Walters; Do I Have To Take Care of Everything?, de la finlandesa Selma Vilhunen, y la producción británica The Voorman Problem, dirigida por Mark Gill.
El corto narra la experiencia de dos cooperantes españoles -Gustavo Salmerón y Alejandra Lorente- en un país africano en conflicto, donde se enfrentan con el drama de los niños que son secuestrados por los rebeldes para convertirlos en soldados. “Queremos ganar y creemos que tenemos posibilidades”, afirma Crespo a dos días del desenlace de esta aventura americana que espera sea “un empujón a mi carrera”. Aquel no era yo ha tenido críticas divididas: “ha gustado y no ha gustado, pero no ha dejado indiferente, y esto es algo muy positivo para una pieza cinematográfica”.
