iCmedia reunió este lunes a representantes de la UE, Gobierno, el regulador y empresas para pedir un gran pacto social de contenido audiovisual positivo para menores. Para exigir el cumplimiento de las normas que protegen a los menores, Julia López de Sa, Subdirectora de Audiovisual de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), aclaró que son un regulador independiente, y que ejercerán las competencias de supervisar “el cumplimiento de la legislación vigente en la protección de menores en contenidos audiovisuales”. Dialogarán, dijo, con los agentes del sector, pero la CNMC “tiene el objetivo de que se cumpla lo estipulado por la ley para el horario infantil” en las televisiones. Más aún –agregó-, si la comisión que controla la aplicación del Código de Autorregulación sólo acepta seis quejas de 160 examinadas, como en su último informe, la CNMC deberá actuar”.
La necesidad de proteger al usuario infantil para poder disfrutar de forma segura en el entorno online fue una de las ideas más repetidas durante la Jornada Pantallas Seguras para Menores en Europa organizada por iCmedia (Federación de Usuarios y Consumidores de los Medios) con la participación de representantes de la Comisión y del Parlamento Europeo, del Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) y de iniciativas privadas de contenido positivo para menores.
Charo Sádaba, miembro del consejo asesor de iCmedia y representante española de la iniciativa Positive Content (Poscon), señaló que los esfuerzos deberían centrarse en la construcción de un entorno sano con contenidos que favorezcan el desarrollo del menor, lejos de la prohibición o del simple control de los menores. Charo explicó en qué consiste la red Poscon, que ha publicado unos criterios mínimos que deberían cumplir los profesionales de producción de contenido online para menores. En estos momentos, Poscon está desarrollando una base de datos de contenidos recomendables por países.
Miguel Puente-Patisson, director de Comunicación de la Comisión Europea en España, esbozó el contenido de la Agenda Digital de este organismo y del Libro Verde de Televisión Conectada, entre cuyos objetivos fundamentales están fijar unas reglas de juego para futuras normas y proteger a la infancia, en el marco de valores europeos. Junto a él, la eurodiputada (PSOE) María Irigoyen Pérez, destacó la actividad normativa del Parlamento Europeo en estas materias, algo muy necesario sobre todo “teniendo en cuenta que el 15% de jóvenes entre 10 y 17 años declaran haber recibido ofertas de sexo en sus dispositivos móviles y el 34% haber encontrado contenidos de sexo no buscados”. Por su parte, José Luis Castellanos, subdirector adjunto de Infancia del Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, analizó los planes del Gobierno para el bienestar de los menores y las medidas de apoyo a su protección, recogidas en el II Plan de Infancia y Adolescencia.
En la mesa redonda con representantes del sector privado, Carlos Biern, presidente de la Federación de Productores de Animación (Diboos) y CEO de BRB Internacional, ve necesario que se haga cumplir la legislación “para que los padres tengan la libertad para dejar a sus hijos frente a contenidos audiovisuales y digitales positivos y de aprendizaje”. Por otro lado, lamentó que “Europa se ha creado atrás en el desarrollo de contenidos online”.
Rodrigo Ron, CEO de El Chupete, Festival Internacional de Comunicación y Publicidad Infantil, coincidió con Biern en que películas como Toy Story son “un spot modélico de comunicación, que dura 90 minutos”. Otro de los participantes en la mesa fue Benji Montoya, co-fundador de Baby Radio, una emisora on line, nacida en 2011 y puesta en marcha para ayudar a sus hijos. Destinada a niños de cero a diez años, pretenden fomentar la imaginación de los menores y enseñarles valores de un modo natural, que es jugando y haciendo las cosas normales de cada días. Además de dos emisoras de FM, disponen de una plataforma de contenidos adecuados para los niños.
El director del Colegio Tajamar, Nacho San Román, expuso la experiencia de ese centro. De sus 1.800 alumnos, 300 (5º y 6º de ESO) no utilizan libros en clase. Les ha servido para preguntarse cuál es el papel del profesor, sobre los contenidos de la enseñanza y la función del colegio. “La enseñanza –dijo- padece una crisis de identidad, pero eso es precisamente una oportunidad para crear nuevos objetivos educativos y pedagógicos. Será posible si toda la comunidad escolar lo enfoca con emoción y no con resignación, porque las nuevas tecnologías ni son nuevas, ni cabe la marcha atrás”.
Cerró el acto, el presidente de iCmedia, José Luis Colás, quien animó a empresas y responsables políticos a un diálogo necesario y un pacto social que favorezca la generación de contenido responsable para niños. “La iniciativa pública no es suficiente, y la privada necesita del apoyo institucional”, concluyó.
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