Bananity.com la nueva red social, se presenta este miércoles en Barcelona apadrinada por Buenafuente Se trata de una start-up muy potente «del tipo de personas que sacarán el país de la crisis!!». Bananity: “Todo lo que amas. U odias. Todo. Menos lo que te da igual.” La idea es de Pau García- Milà y Sergio Galiano, bajo la dirección de Albert Martí. Este miércoles 23, se pelará un plátano muy especial. Bananity.com, la comunidad virtual, arrancará con 120.000 sentimientos de love y hate, es una invitación al humor, y al atrevimiento. Desde Sant Cugat (Barcelona) se presentará a la prensa la versión reloaded del proyecto iniciado el septiembre del año pasado y que llega a su lanzamiento con el apoyo del humorista Andreu Buenafuente. Jürgen Krieger (Ex Grey) y la agencia krieen! también han estado involucrados en el proyecto.
“He querido aportar un granito de arena para solucionar la crisis”, sintetiza Buenafuente. “Es un proyecto innovador, ideado por jóvenes y, sobretodo, quería ayudar a Pau de alguna manera”, explica. Pau, en este caso, es Pau García- Milà, el fundador y director de eyeOS, símbolo de una nueva generación de emprendedores, intrépida y sin miedo a equivocarse. Bananity es una criatura divertidamente gestada por Pau y Sergio Galiano (de COIN+D) mientras jugaban a Overkill en la Wii. Poco después la idea fue tomando forma tecnológica gracias al talento
informático de David Villodre y, por fin, se convirtió en negocio capitaneado por Albert Martí, ex director país de una de las divisiones de la multinacional Sara Lee, con el apoyo de Maria Sanfeliu en el marketing y Carles Iborra como responsable técnico. “Para el equipo es muy importante tener a alguien como Buenafuente como una especie de padrino. A parte de la enorme admiración que tenemos por él, compartimos su tipo de humor. Bananity es exactamente así, con una pizca de atrevimiento y mucha frescura”, afirma Martí.
La startup tiene como ejes la sencillez, la transparencia y la diversión. De hecho, fun es más bien una commodity para el equipo y los
“bananeros” que ya usan la comunidad hace unos seis meses. “Lo más divertido es poder opinar sobre cualquier cosa. Pensar en el idioma Bananity es realmente muy divertido”, resume Pau. “La Sociedad Banana puede ser una de las principales comunidades de internet”.
Para la primera presentación pública este miércoles 23, Bananity.com ya cuenta con una aplicación para iPhone, además de 120.000 loves y hates distribuidos por 15.000 bananities espontáneamente creadas por más de los dos mil usuarios en la fase beta. «Buenafuente, de hecho, es la bananity más amada en este comienzo, seguido por Google, el pan con tomate, chocolate y el Barça», dicen en una nota. Para Maria Sanfeliu, «en Bananity no se cuelgan fotos íntimas. Tampoco se disfruta con chafardear por la vida privada de los demás. La gracia está en “conocer a gente fuera de tus círculos, conectar con gente a través de temas que te pueden interesar”, afirma. Para estar en Bananity, no hace falta añadir grandes datos personales: basta con email, edad, género y el país. Y, eso sí, un nickname, que es lo que identificará al “bananero” al interactuar con los otros usuarios».
“Bananity es 100% democrático: todo el contenido es votable, todos pueden colaborar”, señala Sergio Galiano, que además de co-ideador, actúa como consejero en el desarrollo del proyecto. Como puntos más fuertes él destaca la bidirecionalidad, la “lista de pendientes” (wishlist) y la compleja trama que se forma a medida que los usuarios van amando, odiando, recomendando y compartiendo sus gustos y opiniones.
“Con Bananity crearemos el indexador más completo de las pasiones humanas”, indica Albert Martí. De las 10 acciones para generar recursos (como por ejemplo, patrocinadores, alianzas con marcas líderes, anuncios, etc), ni una de ellas prevé la venta o cesión de cualquier dato de los usuarios. “Queremos trabajar con marketing inteligente, análisis de tendencias y, cuando sea coherente, una publicidad muy suave”, explica. En este comienzo, sin embargo, Bananity nace con aliento propio, sin inversores externos.