Con poco más de 2 años de vida en España, las casas de apuestas online ya mueven una fortuna: 5.600 millones de euros al año y son tremendamente adictivas, y además no se saben los riesgos y abusos a los que someten a los apostadores, según OCU. Desde que el Estado concedió las licencias, las webs de apuestas se multiplican y también lo hacen sus ganancias, gracias a los 300.000 españoles que ya juegan con regularidad. El Perfil del jugador según la Memoria 2013 de la Dirección General de Ordenación del Juego, es: Varón de 25-34 años que juega unos 1.765 euros al mes en apuestas deportivas y póquer.
Lo que no sabes del juego online
1) Los bonos de bienvenida: son el gancho de estas páginas. Al registrarte en la web te ofrecen hasta 100 o 200 euros «de regalo». ¿Cuál es el truco? Hay varios: Es cierto que te dan ese dinero, pero solo si ingresas la misma cantidad de tu bolsillo. Las promociones más agresivas pondrán 200 euros en tu cuenta virtual, pero solo si antes pagas 200 euros.
Antes de poder retirar de tu cuenta el dinero «regalado», te obligan a jugártelo unas cuantas veces (en algunos casos hasta 40 veces). Y en un plazo de tiempo. Por ejemplo: si pones 200 euros te damos otros 200, pero solo podrás llevártelos si antes de 90 días apuestas 200 euros o más. También te obligan a un riesgo mínimo. Es habitual que para poder retirar el «regalo» tengas que haber hecho apuestas con cuotas de 1,5 o superiores.
2) Las cuotas: el número de la cuota son los euros que te dan por cada euro apostado. A mayor cuota, mayor riesgo (es más difícil ganar… pero si ganas cobras más). En las apuestas deportivas, estas cuotas varían a medida que avanza el partido y es posible apostar incluso en los minutos finales. El gran problema es que en las propias condiciones de la web se avisa de la exención de responsabilidad ante posibles «errores». Si apuestas en el minuto 85 de un partido de fútbol y te conceden una cuota muy alta, a la hora de cobrar esta cuota podría cambiar y ser más baja (la página alegaría que hubo un error al calcularla).
La Asociación de Víctimas de Fraude en el Juego Online ha denunciado que si el jugador gana mucho dinero se le limita la cantidad que puede apostar, se le ponen dificultades para retirar sus ganancias o incluso se bloquea su cuenta. Obviamente, nunca ponen un límite a las pérdidas que puedes sufrir.
3) Los impuestos: Hacienda está poniendo la lupa en el juego online. Si eres jugador y a lo largo del año consigues un saldo neto positivo (ganas más de lo que pierdes), ese dinero tributa al tipo marginal del IRPF (entre el 24% y el 43% según el caso).
5 consejos para que controles
Solo las máquinas tragaperras generan más ludópatas que el juego online, según datos de la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR). Pero en Internet todo va más rápido: la adicción tarda 2 años o menos en manifestarse (mientras que en el juego «tradicional» se necesitan hasta 6 o 7 años).
Tras esta clara advertencia, estos son los 5 consejos OCU para quien pese a todo decida apostar para las web españolas: son las únicas que tienen licencia para operar en nuestro país. En una web .com no podrás reclamar en caso de problemas. En una web .es podrás reclamar. Las garantías aumentan cuando incluyen el distintivo Juego Seguro y cuentan con un teléfono gratuito de atención al cliente.
Con tarjeta prepago, de crédito o Paypal: la manera de ingresar/retirar dinero en estas webs es crucial porque ahí es donde pueden hacerte un agujero. Elige métodos seguros.
Siempre con límites: antes de apostar debes fijar un tope de dinero que puedes perder sin que eso te altere la vida. Son preferibles las webs que tienen la opción de fijar un límite económico por día, semana o mes. «Haz balance -señala OCU- apunta lo que vas ganando y lo que vas perdiendo. Si no lo haces, recordarás las ganancias y olvidarás las pérdidas. La realidad suele ser diferente: si todos los jugadores recuperasen lo apostado, no habría ni casas de apuestas ni casinos. OCU recomienza pedir ayuda si se pierde el control en OCU Salud (900 101 851) o a la FEJAR (900 200 225)».