El 66% de los españoles piensa que las empresas tienen más poder a la hora de cambiar las cosas que los propios gobiernos, según se desprende de la última oleada del Informe Socialogue de IPSOS, realizado en 24 países de todo el mundo. Estos datos confirman la mala imagen de la clase política, no sólo en España, sino a nivel mundial, donde la media a favor de las compañías en detrimento de los gobiernos se sitúa en el 63%. Parece claro que son las grandes corporaciones las que contribuyen más al bienestar y desarrollo económico y social, a través de la investigación en I+D+i, la erradicación del hambre y la pobreza en el mundo, o con avances tecnológicos que mejoran el día a día de las personas.
Cabe destacar la situación de Alemania y Francia, donde más de las tres cuartas partes de la población (79% y 75% respectivamente) destacan la importancia de las empresas en este sentido. Por el contrario, sorprende que los italianos son los únicos europeos que defienden que el poder político (53%) está por encima del corporativo (47%). Dentro de España, los hombres son los que más apoyan esta teoría (69% frente al 63% de las mujeres), las clases sociales altas (83% frente al 66% de las clases bajas y el 65% de las medias), y los mayores de 50 años (73% de los encuestados, por encima de las edades comprendidas entre los 35 y 49 años con un 64% y los menores de 35, también con un 64%).
En palabras de Francesc Costa, director general de IPSOS en España “la imagen de la clase política atraviesa en los últimos años una grave crisis, no sólo en España, sino a nivel mundial. Dentro de este ambiente de confusión y desconfianza generalizado, parece que las estrategias de comunicación de las grandes compañías han sido mucho más sólidas y efectivas que las de las administraciones públicas”.