El 70% de los desempleados recurren a Internet para buscar su futuro en El Gordo de Navidad del próximo sábado, según datos de Nielsen España, compañía experta en medición de audiencias e investigación de mercados. En la actualidad, la tasa de paro alcanza ya el 25% de la población española aunque golpea con especial virulencia a los menores de veinticinco, que representan ya más de la mitad de los desempleados. El análisis de Nielsen revela que este año los jóvenes recurrirán más que nunca a tradiciones tan arraigadas como la lotería de Navidad en busca de un futuro mejor, con la red como telón de fondo para seleccionar el número de la suerte y la administración fetiche, con indepencia de su situación en el mapa.
No obstante, también los parados de más de cincuenta y cinco años, que suponen el 17% de los desempleados actuales -según datos de la última EPA- confían en la lluvia de millones que repartirá este fin de semana el Gordo navideño. Tanto es así que casi un 13% de ellos se anima a comprar sus décimos a través de Internet, subiéndose así al carro digital.
Y es que el juego de la lotería a golpe de ratón no deja de sumar adeptos año tras año. Estas Navidades, casi nueve millones de personas consultarán o adquirirán sus billetes desde el ordenador, un 11,5% más que el año pasado.
Sin embargo, el informe de Nielsen muestra que no son sólo los desempleados los que buscan su suerte en la lotería a través de la red, sino que casi el 7% de los jubilados también lo hace.
Los datos de Nielsen ponen de manifiesto que son precisamente los hombres los que más intentan conjurar a la diosa fortuna. Así el 60,7% de los jugadores son varones frente a casi el 40% de las mujeres. Respecto al poder adquisitivo, los datos de Nielsen muestran «cómo la necesidad hace el juego» ya que son las rentas más altas las que menos confían en la suerte.
Según el director de Media Analytics & Social Media de Nielsen España, David Sánchez, «Internet se ha convertido en el canal fundamental para jugar a algo tan tradicional y arraigado en nuestra cultura como el Gordo de Navidad o la Lotería del Niño. Es cierto que hay quien por superstición no renuncia a hacer largas colas frente a las administraciones fetiche, pero lo que es indudable es que la red es hoy el aliado perfecto para los servicios de loterías y apuestas».