El Consejo de Ministros podría sacar adelante finalmente un nuevo decreto para el Plan del Dividendo Digital sin las frecuencias de TDT cuyas adjudicaciones anuló la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo de 27 noviembre de 2012. Por ello UTECA ha anunciado su recurso al Acuerdo del Consejo de Ministros de 22 de marzo, que aceptaba la sentencia del Supremo contra la resolución del Consejo de Ministros de 16 de julio de 2010, que asignaba un múltiples digital de cobertura estatal a cada una de las sociedades licenciatarias del servicio de televisión digital terrestre de ámbito estatal, directamente sin mediar concurso, incardinando la ejecución de la misma en el proceso de liberación del conocido como «dividendo digital», según ha podido saber El Programa de la Publicidad.
Fuentes consultadas por El Programa de la Publicidad, creen que de no aparecer los canales, en el texto solo significaría que se sigue negociando y que ese espacio del espectro queda libre en el Plan de Liberalización del Dividendo Digital. Precisamente las tvs privadas anunciaban su contraataque al gobierno, con una decisión unánime de la Junta Directiva de UTECA para interponer recurso contencioso-administrativo contra el acuerdo del Consejo de Ministros el 22 de marzo de 2013, de ejecutar la sentencia del TS de anulación de la asignación de múltiples digitales. Se trata de una sentencia que afecta a la última adjudicación de canales de tdt del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, por incumplir la propia normativa de adjudicación aprobada meses antes en la LGCA. Ante esto la Sentencia del Tribunal Supremo de noviembre de 2012, anuló la asignación de múltiples digitales, que ahora el gobierno, ha lanzado contra las tvs de la Unión de Televisiones Comerciales Asociadas para hacerles ver lo que podría causarles, en caso de seguir presionando desde sus informaciones al gobierno con temas de corrupción y el caso Bárcenas, señalan fuentes de las cadenas. Hace menos de un año el Gobierno celebraba
Precisamente Las cadenas y medios han contraatacado al Gobierno con una campaña incendiaria este fin de semana, especialmente desde el diario El Mundo y su director, Pedro J. Ramirez, uno de los más afectados por la retirada de estos canales, junto con Vocento, pidiendo la dimisión del Presidente del Gobierno.
Hace solo unos meses, en agosto pasado, el Consejo de Ministros aprobaba el plan de impulso de la Televisión Digital Terrestre y de la innovación tecnológica, una apuesta decidida por la televisión de alta definición y por la telefonía 4G (4ª Generación) con las premisas de minimizar el impacto y las molestias a los ciudadanos; limitar el coste global para los ciudadanos y operadores de televisión; adelantar la implantación de la telefonía móvil de 4G en un año, favoreciendo la inversión y la innovación, así como la generación de empleo asociada a esta tecnología; fomentar la televisión de alta definición, y promocionar la innovación y el desarrollo de la industria de fabricación de equipos y tecnologías asociadas a la TDT.
Se fijaba como objetivo para la fecha referencial de liberación del dividendo digital el mes de enero de 2014, facilitando el despliegue de nuevas redes de telefonía móvil de 4G a partir de dicha fecha. Reducir las frecuencias asignadas para prestar el servicio de TV, garantizando un uso más eficiente del espectro, aunque, «gracias a los avances tecnológicos, se garantiza la emisión del mismo número de canales nacionales de TV que los actuales». Este es uno de los caballos de batalla que ha motivado el desencuentro entre concesionarias de las frecuencias y el Gobierno, tras la sentencia del Supremo.
El acuerdo se comprometía al impulso de emisiones de televisión de alta definición de elevada calidad y otras innovaciones tecnológicas en el ámbito de la televisión digital. Un Plan que debería tener un impacto muy favorable del dividendo sobre la economía española: más de doce mil millones de euros en los próximos años, equivalente a alrededor del 1% del PIB. En el ámbito europeo, el impacto se ha estimado en 150.000 millones de euros. Además, se adelanta en un año el despliegue de redes de telefonía móvil de 4G a enero de 2014 frente a enero de 2015 del plan anterior y se reduce, en parte la complejidad técnica que implicaba el Plan anterior, con lo que se disminuyen los riesgos derivados de las actuaciones.
Desde el punto de vista de la televisión pública estatal y de las televisiones autonómicas, el Plan representa el marco general para que afronten el proceso de liberación del conocido como dividendo digital. En el caso de las televisiones autonómicas, «el marco es lo suficientemente flexible como para permitir acomodar las diferentes realidades de desarrollo de este servicio existente en las diferentes Comunidades Autónomas, y facilitar la evolución hacia las emisiones de alta definición, en el contexto general de un aprovechamiento más eficiente del espectro» señalaba el consejo de Ministros de 24 de agosto.
El Plan de impulso de la TDT contaba hasta entonces con el respaldo de las televisiones privadas asociadas en UTECA, que culminó en el impulso de la televisión digital terrestre y la televisión de alta definición de alta calidad con la introducción de servicios innovadores en la TDT. Igualmente, se establecía las bases para que la televisión privada afronte en las mejores condiciones el proceso de liberación del dividendo digital.
