Con motivo de su 25 aniversario, el diario de Unidad Editorial rediseña su versión impresa desde este lunes. Con motivo de su 25 aniversario, EL MUNDO regala a sus lectores un rediseño de su versión impresa, que verá la luz mañana. Una renovada oferta editorial, fiel a su filosofía de innovación y adaptación a los nuevos tiempos. La predominancia del color azul, una primera página más legible y versátil, un producto final más limpio y elegante, y la apuesta de dos periódicos en uno, con la potenciación de EM2 –que incluye la recuperación de la sección de Sociedad–, son algunas de las nuevas señas de identidad.
En todos los soportes. Evoluciona para adaptarse a las nuevas necesidades de los lectores en papel, internet o las aplicaciones de dispositivos móviles. Los lectores de la edición impresa y de Orbyt van a disfrutar de un diario flexible, «que se adapta a las necesidades informativas del día. Es la portada y las páginas las que se adaptan a las noticias y no al revés. La versatilidad de los módulos ofrecen muchas y novedosas posibilidades», explica Rodrigo Sánchez, director de arte de EL MUNDO.
«Es una propuesta de un periódico moderno y más legible. Una evolución, que no cambio, pues sigue haciendo de EL MUNDO un diario reconocible», apunta Casimiro García-Abadillo, director del diario. «El resultado del trabajo es presentar a los lectores una de las publicaciones más atractivas de España y de Europa en cuanto al diseño». «Este rediseño es una evolución natural del trabajo que venimos realizando durante el último año. En realidad, el periódico que hacemos ahora tiene poco que ver con el que hacíamos hace unos años. Éste era el siguiente paso lógico», añade Javier Vidal, jefe de diseño.
Seguramente, una de las novedades más llamativas y notorias sea la predominancia del color azul. «En EL MUNDO caben todos los colores. Hasta el blanco, que en la edición impresa es transparente. Ésa es la esencia del diseño: la transparencia. Nuestra idea ha sido la de ser respetuosos con nuestro pasado, pero ambiciosos con el futuro», reflexiona Sánchez. Cambia la presentación, pero no la esencia. «Acosada por la expansión digital, la prensa escrita tiene que reinventarse continuamente para acomodarse al lugar preferente que tiene reservado en la comunicación. Este cambio que iniciamos mañana no es solo un cambio de diseño y estructura, es un cambio de concepto. El lector no apreciará modificaciones radicales, porque en los últimos años hemos hecho una lenta y constante transición a lo que pensamos que debe ser hoy un periódico», señala Rafael Moyano, vicedirector de EL MUNDO. Este rediseño se ha realizado conjuntamente entre el equipo de diseño del periódico y la redacción, conjugando las necesidades de una y otra parte.
La primera página de EL MUNDO, así como la contraportada, ganan en flexibilidad y elegancia, pero sin perder la contundencia informativa. «El resultado es un periódico más reflexivo, con análisis de las noticias bien diferenciados de la opinión, con más apuestas informativas, con más exclusivas, con más historias personales y con más claves para que el lector pueda sacar sus propias conclusiones. Y, por supuesto, con más investigación marca de la casa. Todo ello en un envoltorio tipográfico y visual muy atractivo», completa Moyano. Esta nueva apuesta editorial enlaza con la línea de los grandes periódicos internacionales, tanto europeos como americanos. «Un diario con grandes historias que leer necesita de un envoltorio atractivo que la facilite sin ser estridente ni artificioso», añade Agustín Pery, director adjunto.
«El diseño de EL MUNDO se engloba dentro de la corriente de estilo centroeuropeo, -señala el rotativo- pero aportando detalles tipográficos norteamericanos. Un diario igual de legible, pero con mayor elegancia. Para ello, se ha reducido la intensidad tipográfica. Los lectores lo notarán en que las negritas desaparecen en beneficio de las redondas. Esto es, un producto final menos estridente y más agradable a la vista. «En una apuesta informativa multisoporte como la de EL MUNDO, las noticias que merezcan ser impresas tienen que tener un tratamiento específico y destacado. Hemos de volver a hacer atractivo el pasear con un diario bajo el brazo. Volver a ser objeto de culto, de deseo y destacar las ventajas y posibilidades que aún tiene el papel frente a los soportes digitales», comenta Sánchez.
«Lo que hemos pretendido es poner en valor la información propia, los reportajes que sólo podrá leer en EL MUNDO, los análisis y enfoques que nos distinguen de nuestros competidores y las firmas que convierten a este diario en el más plural de la prensa española», añade Pery. «La clave está en la edición. Se trata de darle a la redacción la mayor variedad posible de recursos a la hora de plantear sus temas. EL MUNDO es un periódico de edición. Somos un periódico moderno y sobre todo diferente, de una enorme personalidad», completa Vidal.
La contraportada también presenta un diseño renovado. La columna de opinión de Raúl del Pozo –una de las más influyentes y seguidas de la prensa en España– pasa a ocupar la parte superior de la página (hasta ahora se ubicaba en las dos columnas derechas). «El propósito es dotar de mayor presencia e importancia al artículo de opinión», apunta el director de arte. En la segunda mitad de la página, de lunes a viernes, se ubicará una nueva propuesta: Trending Topic. El equipo de community managers de EL MUNDO utilizará un mensaje, una imagen o un aspecto llamativo de las redes sociales para hacer un guiño a los lectores sobre las noticias y tendencias que marcan la actualidad. Un claro ejemplo de convergencia entre los mundos off y on line. Asimismo, Gallego y Rey pondrán el broche final con su peculiar visión del día a día.
Esta nueva propuesta editorial va a permitir a los lectores disfrutar de dos periódicos en uno. La actualidad política, económica e internacional en la primera parte, donde el lector, además de las exclusivas y el análisis, encontrará todo lo que necesita para saber qué está ocurriendo. El ritmo se rompe con EM2, un periódico dentro de otro, con su propia portada, con una apuesta por los temas más sociales y reportajes propios que engloba las secciones de Sociedad, Ciencia, Cultura y Comunicación. «Esta apuesta permite ofrecer a los lectores un periódico más equilibrado. Se trata de consolidar la apuesta que EL MUNDO viene realizando en los últimos meses por EM2», detalla García-Abadillo. «Un espacio para la creatividad y la originalidad», expone Sánchez. «Un lugar para no tener miedo a experimentar y sorprender al lector». Esta segunda parte del periódico gana entidad, tanto en el diseño como en los temas.
Vidal da las claves de este diario que permite una lectura a dos velocidades: «Es un periódico con dos ritmos muy marcados. En el primero la información se presenta de una manera más reposada, más clásica. Se busca la limpieza, el orden y el equilibrio. El segundo ritmo lo representa EM2. Es una apuesta más libre y más atrevida. La unión de contenido y diseño ha hecho de EM2 un producto único, de una personalidad arrolladora. Otro periódico dentro del periódico».
«Lo que intentamos con EM2 es sorprender con apuestas informativas propias y un diseño y una edición muy cuidados, lo que supone una reivindicación de las posibilidades del papel», opina Pedro G. Cuartango, adjunto al director (EM2/Cultura). «Es una apuesta por la cultura de verdad, por aquella que no perecerá, frente a la moda, los intereses de la industria editorial o la frivolidad dominante. Hay que ir más allá de la actualidad o de lo obvio».
Una de las novedades, y de las grandes apuestas informativas en esta nueva etapa, es el traslado de los contenidos habituales de Sociedad a EM2. La actualidad mira hacia la calle, hacia las personas. «El objetivo es explicar cómo vivimos y cómo vamos a vivir en el futuro. Pretendemos reflejar las preocupaciones y los intereses de los lectores; detectar las tendencias sociales, urbanísticas, demográficas… Siempre intentando que la gente sea la protagonista, poniendo cara a la noticia. Queremos abrir las páginas a los expertos, dar voz a los especialistas. Y provocar el debate social», desgrana Ferran Boiza, redactor jefe responsable de esta sección.