Guy Kawasaki, gurú del marketing en la economía Web 2.0, ha sido el protagonista de la ponencia de apertura de la cuarta edición del Foro Internacional de Contenidos Digitales, FICOD 2010, inaugurada hoy por el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, y la Ministra de Cultura, González Sinde, en el Palacio Municipal de Congresos Juan Carlos I de Madrid. Kawasaki destacó, paso a paso, “cómo crear algo tan encantador como Apple” y como convertirse en social networkers de primer orden. Compañero de Steve Jobs, fué uno de los grandes evangelizador de Apple en los ochenta y explicó como encantar a clientes y empleados, con consejos recogidos en su última obra, «El Arte del Encantamiento». Para Kawasaki “volverse encantador es una habilidad clave en este nuevo mundo originado en torno a los medios digitales” . «Consigue gustar a la gente, sonríe con sinceridad; vístete apropiado para tú audiencia; trabaja para perfeccionar tú apretón de manos y adquiere la actitud de decir sí por defecto; haz que confíen en ti; posiciónate bien en el mercado utilizando mensajes de marketing “cortos, dulces y fáciles de absorber”; vence la resistencia dando pruebas de tu eficiencia y céntrate en contar una gran historia. Estas son algunas de las claves de las que ha hablado Kawasaki para conseguir catalizar el cambio en las mentes de los que te rodean, la mayoría ya conocidas por todos y sin embargo, poco aplicadas en el día a día de la vorágine laboral. El americano de origen japonés ya ha escrito 9 libros sobre la nueva era digital, entre los que destacan los superventas: Cómo volver Locos a tus Competidores o El Arte de Empezar. Actualmente ha creado su propia empresa de capital riesgo, Garage Technology Ventures, donde trata de descubrir los “inventos de garaje” que buscan triunfar a través de las nuevas tecnologías. Como ha afirmado ante los asistentes de FICOD, “todas las Start-ups que usan la alta tecnología han comenzado con dos personas en su garaje creando un producto que ellos necesitan para hacer su vida más fácil”. Así es como surgieron las compañías que han revolucionado nuestro tiempo como Yahoo o Google. Kawasaki también ha hablado de los nuevos formatos de marketing en la era de la tecnología 2.0. Inistió en que las marcas nunca deben renunciar a la gente que puede llegar a ser un verdadero embajador de tu marca, la gente corriente, que ha hecho triunfar a iniciativas brillantes como Facebook, My Space o Twitter. Y no por ser ricos, famosos o expertos, que en todo caso siempre serán muchos menos que la gran mayoría. Lejos quedan “aquellos días en los que las grandes publicaciones decían lo que hacer”, ahora «son los propios usuarios los que tienen el poder del marketing viral y decidir que producto o servicio triunfa y cual fracasa». Kawasaki con constantes bromas, no dejó de menospreciar a Microsoft, con ironía. Entre las claves del éxito en las empresas destacó el ser siempre positivos. Caer bien y generar confianza (señaló el ejemplo de Amazón, con su oferta de vender un kindle y poder de devolverlo gratuitamente, porque confian en sus clientes, o el de Zappos.com que permite probarse zapatos a domicilio y devolverlos sin coste, etc. ). Hacer bien lo que uno hace. Hablar claro en las presentaciones y de forma digerible, no con la jerga de la industria. Plantar muchas semillas (nunca sabes quien es tu mejor embajador y a quien interpreta mejor tu mensaje). Ser encantador y superar la resistencia inicial contra tí o tus intereses. (ej. Nintendo superó la reticencia norteamericana a los videojuegos, cambiando el aspecto de uno de ellos por el de un robot educativo, y arrasó en las navidades, ya que los niños pidieron «el juego educativo», en lugar de un videojuego). Encantar a todos los que tengan influencia (mi hija pequeña, en mi casa). El dinero no debe estar destrás del encantamiento (¿me gusta algo porque es mi trabajo, o me pagan por ello, o me gusta realmente?). Kawasaki habló del poder de la reciprocidad y el agradecimiento. Si te trato bien espero que en algún momento me sea devielto el favor y puso varios ejemplos como el de la ayuda de Méjico a Etiopía cuando pasó por una gran hambruna. Etiopía, pese a que no le sobraba, devolvió el favor 50 años después cuando Méjico más lo necesitaba. O el caso de un camión de bomberos de regalo de South Carolina a Nueva York, porque hacía 133 años, Nueva York hizo lo mismo con South Carolina. Para Kawasaki, la gente lo que quiere decir cuando dice «De nada», es que «sé que harías lo mismo por mí». «Confío en tí. Me caes bien» y así se establece una relación contínua, un ecosistema. Todos los encantadores deben saber hacer una buena presentación que facilite tomar una decisión. Por último Guy Kawasaki, destacó el poder de la tecnología, la rapidez y el hacer equipo con los jefes.