Imprescindibles’ profundiza en la figura de Blasco Ibáñez y sus vínculos con la I Guerra Mundial, en el centenario de la contienda que el escritor retrató en ‘Los cuatro jinetes del Apocalipsis’, producido por Buenpaso Films y TVE, y dirigido por Rosana Pastor y Enrique Viciano. ‘El quinto jinete’ dará a conocer la dimensión internacional del escritor Vicente Blasco Ibáñez y sus vínculos con la I Guerra Mundial. Es un documental dramatizado, dirigido por Rosana Pastor y Enrique Viciano y coproducido por Buenpaso Films y TVE, que a través de las reflexiones plasmadas en la obra de Blasco Ibáñez reconstruye la visión del escritor sobre la I Guerra Mundial y se acerca a su figura, tan controvertida como apasionante. Se emite este viernes en ‘Imprescindibles’, que recuerda así el centenario del comienzo de la contienda.
Vicente Blasco Ibáñez escribió ‘Los cuatro jinetes del Apocalipsis’ entre 1915 y 1916, durante la I Guerra Mundial. El documental ‘El quinto jinete’ arranca con Blasco Ibáñez en su estudio de la rue Rennequin, París, escribiendo sus artículos periodísticos a favor de los aliados. En ellos da cuenta de su estado de ánimo, las disputas con su editor, la visita que el Presidente de la República le facilita al frente del Marne y a Reims y la persecución que sufre por sus ideas.
Mientras, una realizadora de televisión, Clara Fuster, se propone desentrañar la madeja de opiniones, documentos e imágenes que envuelven al escritor de cara a un encargo para la conmemoración de la I Guerra Mundial. Para conseguir su cometido, tiene que documentarse, realizar entrevistas a personalidades y expertos muy diversos relacionados con las dos versiones cinematográficas de 1921 y 1962 de la obra de Blasco Ibáñez (Paul Smith, Christopher Anderson, Pura Fernández, Kevin Brownlow, Patrick Stanbury, Aurora Bosch, Rafael Corbalán, Cécile Fourrel de Fretes, Rosa María Rodríguez Magda, Román Gubern, Joan Oleza, Facundo Tomás, Ramón Tamames, Josep Carles Laínez, Ramiro Reig) y grabar en localizaciones de Valencia, París, Londres, Los Ángeles y Nueva York.
Con el fondo de imágenes de la I y II Guerra Mundial y abundancia de documentos, Clara Fuster va dando forma a la historia que quiere contar, contrastando las opiniones que encuentra a su paso, y luchando por encontrar objetividad e imparcialidad en un escritor tan controvertido como apasionante.