Se trata de un Comunicado de la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) sobre datos del VI informe del Comité de Autorregulación de Contenidos Televisivos e Infancia filtrados a los medios, sobre que las quejas recibidas son muy superiores a las filtradas por las tvs. Señala que de ello quedará constancia en el informe de la Comisión Mixta de Seguimiento del Código una vez se difunda. En relación a las informaciones publicadas por algunos medios de comunicación sobre los datos del sexto informe del Comité del Código de Autorregulación de Contenidos Televisivos e Infancia, la Asociación de Usuarios de la Comunicación quiere aclarar que:
1) Los datos publicados por la prensa estos días parecen hacer referencia a las quejas que las cadenas están dispuestas a aceptar sobre el total de las quejas presentadas por los espectadores. Si ello fuera así, hay que decir que en estos momentos los únicos que conocen tales datos son los operadores de televisión, que son los que forman el Comité de Autorregulación del Código, por lo que la filtración sólo puede provenir de alguna o algunas cadenas.
2) Los datos que anualmente se hacen públicos son los aprobados y difundidos por la Comisión Mixta de Seguimiento del Código de Autorregulación de Contenidos Televisivos e Infancia, cuyo sexto informe todavía no ha sido elaborado. En todo caso, y sin entrar en las cifras reales que darán lugar a ese sexto informe, sí podemos decir que son muy superiores en cuanto a quejas recibidas de los espectadores a las que la filtración recoge.
3) En la información publicada se mezclan de modo confuso las quejas ante el Código de Autorregulación y las infracciones y sanciones que pueden imponerse a las cadenas por parte del Ministerio de Industria. Ni todo incumplimiento del Código supone necesariamente un incumplimiento de la Ley General Audiovisual, ni el Código de Autorregulación tiene capacidad sancionadora, ni la existencia del Código de Autorregulación excusa a la Administración de cumplir con sus obligaciones de vigilancia, control y sanción en el ámbito televisivo.
4) Todo lo anterior no es óbice para que sigamos lamentando el escaso número de quejas que se presentan ante el Código, debido en gran medida a la falta de interés por las cadenas para darlo a conocer y a la falta de credibilidad del mismo entre aquellos espectadores y organizaciones sociales que sí lo conocen. Y que sigamos lamentando también las graves insuficiencias del modelo de autorregulación establecido, que lo convierten en ineficaz como ya hemos señalado en diferentes documentos de AUC.