Hasta 50 millones de hogares en todo el mundo podrían disponer de dos o más servicios distintos de televisión de pago durante 2014, generando unos ingresos aproximados de 5.000 millones de dólares según Deloitte. Se estima, además, que cerca de cinco millones de estos hogares podrían disponer de tres o más proveedores. Se trata de una de las previsiones en materia de Medios de Comunicación del informe “Predicciones 2014”, que elabora cada año Deloitte, y que analiza las principales tendencias para los próximos meses para los sectores de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones.
Aunque la televisión a la carta (SVOD) ha ido en aumento, la televisión de pago basada en plataforma (satélite, cable o IPTV) seguirá siendo el principal servicio (895 millones de hogares contaban con televisión de pago en 2013, generando 245.000 millones de dólares). Esta tendencia contradice las expectativas del llamado cord cutting («corte de cables»), que pronosticaba la cancelación en los hogares de las suscripciones a televisión de pago o la sustitución por paquetes de servicios de SVOD.
La introducción de técnicas de medición híbridas durante 2014 hará que la medición de la audiencia televisiva en los hogares sea más precisa. Esta nueva metodología integra el visionado tanto de televisión como de ordenadores personales, tabletas y smartphones, e incluye otros datos como la elección de canales en los decodificadores y los registros de los servidores de televisión a la carta.
La visualización en dispositivos distintos del televisor en los mercados desarrollados con una penetración de la banda ancha del 75% o superior representa entre el 1% y el 2% de toda la visualización, y hasta el 5% en el colectivo de telespectadores más jóvenes. Una medición precisa es, por tanto, fundamental para la publicidad televisiva, el principal producto publicitario, que representa cerca de 200.000 millones de dólares anuales en todo el mundo.
No obstante, aunque la medición será más precisa, la creciente visualización de televisión de otros países a través de servicios over-the-top (OTT) no será tenida en cuenta (el coste de esta medición no es aún rentable), por lo que las cifras de consumo de televisión seguirán siendo algo inferiores a las reales. Según Deloitte, en 2014 el valor de los derechos de emisión de contenidos deportivos premium (aquellos relativos a las competiciones más populares del mundo: fútbol; ligas norteamericanas de baloncesto, béisbol, hockey y fútbol americano; competiciones automovilísticas; y criquet) se incrementará hasta los 24.200 millones de dólares, un 14% más que en 2013. Este incremento, que se ha visto impulsado por los nuevos acuerdos con algunas ligas nacionales de fútbol europeo, como la Premier League inglesa y la Bundesliga alemana, y con competiciones norteamericanas, como la Liga de Béisbol, contrasta con el crecimiento medio del 5% registrado entre 2009 y 2013.
El 75% del valor total de estos derechos de emisión será generado por diez competiciones: las ligas de fútbol de primera división de Alemania, España, Francia, Inglaterra e Italia; la Liga de Campeones de fútbol; y las ligas profesionales norteamericanas de baloncesto, béisbol, hockey y fútbol americano.
La televisión de pago ha transformado la forma de retransmitir las principales competiciones deportivas. Este tipo de contenidos son uno de los motivos principales de suscripción y sostienen, en gran medida, estos modelos de negocio, al conseguir grandes audiencias con un perfil demográfico atractivo desde el punto de vista publicitario. Los derechos de ejecución impulsan los ingresos del sector de la música grabada. Unos ingresos procedentes de estos derechos en que el canon que hay que pagar por reproducir música en público, podría superar por primera vez los mil millones de dólares, una cifra sustancial para una industria que mueve 16.000 millones de dólares al año.
Los ingresos por derechos de ejecución, exigibles a negocios de todos los tamaños, desde bares hasta cadenas de televisión, seguirán aumentando a lo largo de los próximos años. Este crecimiento viene impulsado por tres fenómenos: el incremento del número de negocios que pagan canon de forma proactiva; el incremento del canon pagado por grandes empresas, como cadenas de televisión y emisoras de radio; y el incremento del número de países que cuentan con un mecanismo formal para el cobro de cánones (la incorporación de China, por ejemplo, podría suponer decenas de millones de dólares más al año en este segmento).
Estados Unidos, que representa casi la mitad del total de los ingresos, podría generar además un incremento importante del volumen de negocio con la introducción de un derecho de ejecución para la radio FM analógica, actualmente exenta de estos pagos
El vídeo a la carta «inalámbrico» gana terreno en África subsahariana, según Deloitte que prevé que en 2014 el número de usuarios de vídeos a la carta (VOD) en esta región se incrementarán en aproximadamente un millón (250.000 hogares), a pesar de la falta de infraestructura de banda ancha en la región. El contenido VOD se reproducirá a partir de grabadores de vídeo digital (DVR) y los archivos se distribuirán principalmente vía satélite y, para unos pocos hogares, a través de transmisión digital terrestre.
