La “rabieta” del deportista «es un mal ejemplo para los niños que pueden encontrar en el enfado una forma de conseguir lo que quieren» señala el Festival de Publicidad Infantil, «El Chupete» ya que «Lo que sus ídolos hacen, los niños lo imitan. Una idea que muchos deportistas deben tener en cuenta a la hora de actuar en el terreno de juego». Un mensaje que se trasmitió en la VII edición del Festival El Chupete y que algunos personajes públicos como Cristiano Ronaldo todavía no han asumido. Una vez más, es necesario hacer reflexionar a personajes públicos, de la talla de Cristiano Ronaldo, a que se den cuenta de que sus acciones públicas tienen un efecto en la infancia, y que ellos representan el modelo al que muchos niños aspiran a ser. En este caso, el enfado del deportista puede provocar que los menores reciban un mensaje erróneo en el que entiendan que con una “pataleta” puedan conseguir lo que quieren.
10 millones al año, es lo que ingresa el astro del fútbol, su tristeza se ha plasmado en sus celebraciones y su malestar ha trascendido los campos de fútbol convirtiéndose en noticia. El mensaje que trasmite su reacción llega a desdibujar al deportista creando la imagen de un profesional orgulloso más preocupado por su nómina que por disfrutar con su trabajo, jugando al fútbol y, alimentando el espectáculo en el que participa y con el que sueñan millones de niños. Ronaldo no está trasmitiendo la imagen que de él se espera, ser un profesional de deporte y un ejemplo a seguir por millones de niños. Un nuevo escenario para recapacitar sobre el mensaje que los deportistas trasmiten a través de los medios de información y que el público infantil acaba recibiendo.