Una nueva realidad a tener en cuenta o preocuparse. En Navidad la crisis hace que las empresas saquen su lado más creativo. Los niños entra en contacto con las marcas a través de internet a edades cada vez más tempranas. Juguetes, videojugeos, y demás productos infantiles empieza a hacer acto de presencia a todas horas en la parrilla televisiva, podemos constatar que “la navidad ha llegado” y que la publicidad es el emisario, señalan los organizadores del Festival de Comunicación Infantil, El Chupete. La crisis económica, acabará afectando en la bolsa de los regalos. Para el director de este Festival Infantil El Chupete, Rodrigo Ron “Los padres o tutores deben de enseñar a los niños a saber elegir, ya que hay mucha mas felicidad en saber elegir que en tenerlo todo. En Navidad la alegría e ilusión debe de ir ligada a una buena elección, no al consumismo desenfrenado”. Declaraciones que se enmarcan en que los pequeños tienen a un simple click la ventana global. Según un estudio realizado por Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) más de la mitad de los niños de 10 años posee móvil. El estudio también informa que el 97% de los menores de entre 10 y 17 años tiene ordenador y el 91% conexión a Internet. Datos que manifiestan hacia dónde está girando el rumbo de la comunicación y quiénes son los principales usuarios. Y en la inmensa mayoría de los casos sin ningún adulto presente. Ser creativo, no intrusivo, es la clave, y más aún en Navidad donde la ilusión mueve montañas. Con la idea de que los niños son los protagonistas de estas fechas las empresas han empezado a aprovechar el éxito de internet entre los más jóvenes lanzando campañas con un bajo coste y aprovechando su masivo acceso a este medio. Una herramienta más para que los menores, aún viviendo en una época de sobreabundancia de información, no pierdan la ilusión por el espíritu de la Navidad. El número de regalos, no debe comprometer la ilusión con la que se vive estos días. Los menores poco a poco van asumiendo el rol social y colaborativo que comprende la red. Son usuarios activos de páginas web y redes sociales en las que compartir o intercambiar juguetes, o portales en los que donar sus bienes más preciados a los desfavorecidos. En definitiva, son un modelo de cómo la era digital está siendo abanderada por niños y adolescentes concienciados, que son el paradigma de la solidaridad. Como conclusión, el Festival hace una reflexión sobre que «la creatividad debe ser el motor que mueva el espíritu de esta navidad. En época de crisis, los padres deben adaptarse para proteger esa ilusión con la que se deben vivir estos días, trasmitiendo de la mejor forma posible la magia de la navidad. Además, poco a poco vamos descubriendo el perfil más tecnológico de los menores. Perfil que las empresas han aprovechado a la perfección para llegar hasta ellos de la manera más creativa y asequible posible». «Pero por mucho que haya avanzando la tecnología, la publicidad online y offline contribuyen a proteger y potenciar esa ilusión e inocencia que se vive en navidad. Mientras el papel de los padres y tutores es el de trabajar para enseñar a los niños qué rol tienen que protagonizar en el mundo online y offline, e ir acompañándolos para que lo desempeñen correctamente». Pero sin olvidar por las marcas -dentro de su Responsabilidad Social- que tratan con menores y que la agresividad comercial debe ser ética y legal en los tipos de promociones que hace a los chavales situados frente a sus ordenadores y las ofertas.