El 44% de los encuestados asegura subir vídeos para ganar dinero y profesionalizarse. Sin embargo, solo el 14% puede vivir de su actividad en Youtube como única fuente de ingresos. El fenómeno de los youtubers está cada vez más y más extendido, y no son pocos los jóvenes que anhelan convertirse en uno de ellos, haciendo de su afición algo más que un simple hobby. Sin embargo, no todos los youtubers suben vídeos para ganar dinero, ya que solo el 44% tiene como principal objetivo monetizar su canal con vistas a profesionalizarse, según refleja un estudio realizado por la agencia de comunicación Cohn & Wolfe en colaboración con la plataforma de influencers en Youtube Brantube.
Por el contrario, el resto de youtubers lo considera más un hobby que una profesión, y prefiere compartir su contenido para entretener a sus suscriptores y contentar al público. Además, hasta un 35% destaca, como objetivo añadido a los anteriores, que su intención es lograr que aumente su notoriedad, trabajando en su marca personal.
Otro de los interrogantes presentes al hablar del fenómeno youtuber es si realmente se puede vivir de ello. Según el estudio, menos del 14% de los youtubers encuestados se dedican de manera exclusiva a esta actividad, mientras que la mayoría, un 86%, lo compagina con otros trabajos.
Estas cifras reflejan que la profesionalización de los youtubers, considerando a estos como aquellos usuarios de YouTube que suben contenidos propios regularmente, está reservada solamente a unos pocos. Esto se debe a que las principales fuentes de ingresos son los patrocinios de las marcas y la publicidad que YouTube incluye en sus vídeos. En ambos casos, las ganancias están directamente asociadas al número de visualizaciones, y se debe tener en cuenta que solo se empiezan a generar ingresos cuando se llega a una cifra crítica, que YouTube ha marcado en 10.000.
Por ello, los youtubers consideran que las marcas son necesarias, y no es de extrañar que casi el 98% de los encuestados esté abierto a colaborar con ellas en la creación de contenidos para su canal. Sin embargo, hay que destacar que solo el 33% colabora con ellas de forma puntual, y siempre y cuando estén alineadas con sus valores y contenidos.
¿Cómo piden que sea la relación con las marcas?
En este contexto, las marcas deben valorar qué pueden ofrecer a cada youtuber. Algunos de ellos estarán dispuestos a colaborar si se les ofrece un contenido de calidad y exclusivo, si se les facilita acceso en primicia a productos nuevos o si la campaña va a servir para aumentar su número de seguidores.
Sin embargo, la mayoría de las colaboraciones implican un coste y un patrocinio, sobre todo en aquellas que conlleven obligaciones contractuales para los youtubers. Para Ignacio Casas, Director del Grupo de Innovación Digital de Cohn & Wolfe Madrid, “cada youtuber tiene sus propios objetivos y prioridades y, por ello, lo más importante es que las marcas establezcan una relación previa con ellos, para conocer su expectativas y ver cómo encajan en su estrategia de marketing”.
A este respecto, es importante que las marcas sean conscientes de que la principal exigencia que los youtubers plantean ante posibles patrocinios es la libertad creativa (en el 53% de los casos), una demanda que está incluso por delante de los incentivos económicos (24%). En tercer lugar, para casi el 11% de los encuestados, lo más importante es que la relación entre ambos sea a largo plazo.
Ignacio Casas puntualiza este dato: “Puede llamar la atención que apenas 1 de cada 4 youtubers destaque los incentivos económicos por delante de la libertad creativa, pero dado que muchos de ellos no persiguen la profesionalización, consideran que lo importante es poder ser fieles a su público y a sí mismos. Muchas marcas ya tienen en cuenta esto, ya que así preservan la naturalidad de los youtubers, que es, junto con la segmentación, su principal valor añadido”.
Para Rafa Bernabeu, CEO de Brantube, “los youtubers buscan generar contenidos que gusten a sus suscriptores, y es por ello que no les interesa desviarse de su temática, por lo que adaptan los productos y servicios de las marcas a los gustos de sus seguidores. Hay que tener en cuenta que es el estilo de los vídeos, y más en Youtube, lo que convierte a un youtuber en un amigo que da consejos”.