Mediaset España desmiente totalmente lo publicado en distintos medios de comunicación sobre la presunta saturación de sus procesos en los Juzgados de Alcobendas y aclara que «tiene su domicilio social en Madrid y, por tanto, pertenece al partido judicial de la capital». Según un comunicado, es en los Juzgados de Madrid «donde se tramitan casi la totalidad de sus procesos. Sólo acude a los Juzgados de Alcobendas cuando el demandante así lo plantea por tener allí fijado su domicilio, como es el caso de los residentes en La Moraleja, urbanización de la citada localidad».
«Las condenas de José María Aznar, Enrique Iglesias y Pepe Navarro, mencionadas por distintos medios, se siguieron ante los Juzgados de Primera Instancia de Madrid, no de Alcobendas. En los demás pleitos relativos a Carmen Lomana, Raquel Bollo o Rosa Benito, Mediaset España ni siquiera es parte» y concluye indicando que «Mediaset España está dispuesta a combatir con todos sus recursos y las vías legales a su alcance todas las informaciones tendenciosamente falsas publicadas sin previo intento de contrastar la información y que perjudican injustamente el honor y la imagen de la compañía».
La polémica surgió hace un par de días cuando el diario Correo y los medios que lo citaron la noticia que señalaba que Alcobendas se había convertido en un ir y venir de rostros de Telecinco. Los colaboradores de sus programas inician sus peleas en los platós y las terminan en los juzgados. El resultado: un tribunal lleno de famosos y una magistrada que deja su cargo por no poder hacer frente a este tipo de casos. El diario señalaba que una magistrada había dejado su trabajo hace unas semanas ante la ingente cantidad de casos televisivos en sus salas. El error según el desmentido de Telecincco no es que sea incierta el asunto de la saturación, sino que, en todo caso se trataría de colaboradores de las productoras que emiten en la cadena, ya que ésta tienen como sede judicial no Alcobendas -como decía la información- sino Madrid.
El diario indicaba que la magistrada que ha abandonado el tribunal, señaló que este tipo de querellas absorbe el tiempo de los trabajadores del juzgado en lugar de atender otro tipo de casos y “Convierte a los jueces en rehenes de los higadillos de la telebasura”, según magistrados de Alcobendas. Otro aparente error es que de esos juzgados habían salido «cuantiosas indemnizaciones, entre las que indicaba que Telecinco tuvo que pagar 180.000 euros a José María Aznar y Ana Botella por hablar de una separación o 336.000 euros a Enrique Iglesias por publicar fotos manipuladas de un desnudo y 270.000 euros a Pepe Navarro por hacer alusión a una falsa paternidad».
