Promotora de Informaciones, S.A. (PRISA) ha comunicado una nueva información relevante, que se suma a la del pasado 31 de mayo, a la CNMV, en la Compañía confirma «la refinanciación, ppor determinados bancos al Grupo una nueva línea de liquidez por importe de hasta 80.000.000 euros». Se trata de la propuesta presentada el día de hoy a la totalidad de sus acreedores financieros, de restructuración de su deuda financiera.
«Esta propuesta cuenta ya con el apoyo de un grupo de acreedores representativos de un 72,9% del total de la deuda financiera. La Compañía espera obtener el apoyo unánime a la misma y que se pueda materializar en las próximas semanas. En el contexto del referido proceso de refinanciación, determinados bancos han aportado al Grupo una nueva línea de liquidez por importe de hasta 80.000.000 euros. El objetivo de la refinanciación es otorgar liquidez adicional a la Compañía, extender los vencimientos de la deuda financiera sindicada y bilateral de PRISA, ajustándola a la evolución esperada del negocio y dotándola de mayor flexibilidad».
Cerberus, el inversor que más deuda impagada tenía del grupo, se ha sumado al acuerdo de refinanciación que la compañía de medios de comunicación alcanzó hace dos semanas con sus cuatro grandes acreedores -Santander, Caixabank, Bankia y HSBC-. El visto bueno del fondo de distress permite salvar el último escollo para alargar por tercera vez en tres años el pago de la abultada deuda del holding de los Polanco y las firmas incluidas en Liberty. Su principal ejecutivo y la cara ante las entidades financieras, Fernando Abril-Martorell, apuntaba entonces que la editora de El País aspiraba a vencimientos no tan rígidos. “La idea es mejorar el escalonamiento de los pagos en función de la evolución del negocio y conseguir más flexibilidad”, subrayaba.
La venta de Digital+ parece que no sería suficiente, para el plácet de los bancos y la entrada de capital Sólo habría un posible comprador para la plataforma digital, Telefónica con un precio, muy por debajo de los 2.300 millones de la valoración que implican los 500 millones que la empresa de César Alierta pagó por el 22% de la compañía.