Norton revela que el cibercrimen le costó 482 millones de euros a España el pasado año, mientras crece un 42% la vulnerabilidad del móvil.

El antivirus Norton revela que hay más de un millón de víctimas diarias y que el cibercrimen le costó 482 millones de euros a España el pasado año. El antivirus Norton ha revelado hoy el coste global del cibercrimen: 114.000 millones de dólares anuales . Si se toma en cuenta el tiempo que las víctimas han perdido debido a las experiencias con el cibercrimen, se suma una cifra adicional de 247.000 millones de dólares . En España se estima que diariamente más de 21.936 personas han sido víctimas del cibercrimen durante el año pasado, sufriendo pérdidas financieras directas de 482 millones de euros y una suma adicional de 5.500 millones de euros en tiempo dedicado a resolver el crimen. Con 431 millones de víctimas globales el pasado año y la cifra anual de 388.000 millones de dólares en el mundo de pérdidas financieras y de tiempo, el cibercrimen ha supuesto al mundo un coste significativamente mayor que el del mercado negro de la marihuana, la cocaína y la heroína juntas (288.000 millones de dólares).

Según el Informe Norton de Cibercrimen 2011 más de dos tercios de los mayores de edad online (69%) han sido víctimas del cibercrimen a lo largo de su vida. Cada segundo 14 adultos son víctimas del cibercrimen, lo que arroja una cifra de más de un millón de víctimas del cibercrimen cada día. Por primera vez, el Informe Norton de Cibercrimen revela que el 10% de adultos ha sufrido el cibercrimen en sus teléfonos móviles. De hecho, el Symantec Internet Security Threat Report, Volume 16, ha señalado un 42% más de vulnerabilidades en los móviles en 2010 comparado con el año 2009, señal de que los cibercriminales comienzan a centrar sus esfuerzos en el espacio móvil. El número de nuevas vulnerabilidades de sistemas operativos móviles reseñadas, se incrementaron de 115 en 2009 a 163 en 2010. Además de las amenazas a los dispositivos móviles, el incremento de las redes sociales y la falta de protección son los principales culpables detrás del creciente número de víctimas del cibercrimen.

El estudio identifica a hombres entre los 18 y los 31 años que acceden a Internet a través de sus teléfonos móviles como las víctimas más propicias para el cibercrimen: cuatro de cinco pertenecientes a este grupo (80%) han sido presas del cibercrimen. Globalmente, el tipo más común de cibercrimen -y de más fácil prevención- son los virus y el malware en ordenadores, con un 54% de los encuestados que afirman haberlo experimentado en algún momento de sus vidas. A los virus le siguen las estafas online (11%) y mensajes phishing (10%). A principios de este año el Symantec Internet Security Threat Report, Volume 16, encontró más de 286 millones de variaciones únicas de software malicioso (“malware”) comparado con los 240 millones reseñados en 2009, lo que representa un incremento de un 19%. “Existe una seria confusión en cuanto a cómo ve la gente la amenaza del cibercrimen”, afirma Adam Palmer, asesor de Norton Lead Cybersecurity. “El cibercrimen es mucho más corriente de lo que la gente cree. En los últimos 12 meses a pesar de que el triple de adultos encuestados han sufrido más crímenes online que crímenes físicos, menos de la tercera parte de ellos piensan que son más proclives a ser víctimas del crimen que del cibercrimen en el próximo año. Y mientras que el 89% de los sondeados está de acuerdo en que hay que tomar más medidas para llevar a los cibercriminales ante la justicia, la lucha contra el cibercrimen es una responsabilidad compartida. Requiere que todos estemos más alertas y que invirtamos en nuestra seguridad online y nuestros Smartphones”. La poca correlación entre la conciencia y la acción está ilustrada con mayor profundidad en el hecho de que el 74% de los encuestados afirman ser siempre conscientes del cibercrimen, pero muchos de ellos no toman las precauciones necesarias. El 41% de los adultos indican que no tienen software actualizado de seguridad para proteger su información online. Además, menos de la mitad revisa con regularidad los extractos de sus tarjetas de crédito por fraude (47%), y el 61% no utiliza contraseñas complejas ni las cambian con regularidad. Entre aquellos que acceden Internet a través de sus teléfonos móviles, solo el 16% instalan seguridad móvil actualizada.