OCU ha acudido de forma anónima a seis concesionarios de las principales marcas para solicitar presupuestos de compra de algunos de los vehículos más vendidos en España y sus condiciones de financiación. “En el estudio hemos comprobado que en todos los casos se ofrecen descuentos por financiar el vehículo, algunos de ellos llamativos: por ejemplo, 2.500 euros en la compra de un Citroën C4, siempre que se financie un mínimo de 6.000 euros a un plazo de al menos 4 años. Sin embargo la información que facilitan en los concesionarios es muy escasa y con la misma resulta imposible saber si la financiación resulta cara o barata”.
OCU ha comprobado que solicitar la financiación en el concesionario es muy sencillo. No es necesario preguntar por la financiación, sino que son los propios comerciales los que ofrecen esta posibilidad al cliente, incluyendo siempre la financiación del automóvil en la oferta que facilitan. Sin embargo, la escasa información que dan al cliente es uno de los principales problemas que el estudio de OCU ha detectado en la financiación por esta vía: el único dato que se facilita ha sido el importe de la cuota mensual. En casi ningún caso se han mencionado comisiones de apertura, servicios de contratación obligatoria, como seguros de vida, extensiones de garantía o programas de mantenimiento; tipos de interés nominales ni TAE aplicables a la operación.
Así las cosas, para el consumidor resulta imposible comparar ofertas y poder decidir cuál es más interesante. OCU ha presentado por este motivo una denuncia ante el Banco de España. OCU denuncia igualmente la existencia de cláusulas de permanencia, que imponen una penalización si se cancela el préstamo antes de determinado plazo; en todos los casos de estudio la penalización es excesiva, pues consiste en la devolución de la totalidad de los descuentos o bonificaciones obtenidos por haber financiado el vehículo. Ante esta situación, OCU aconseja a los consumidores:
En cualquier caso, el coste de la financiación más los productos vinculados (seguros y extras) supera siempre el descuento obtenido por financiar. Por tanto, y a pesar de los descuentos, siempre saldrá más barato pagar el coche al contado.
Financiar a través del concesionario le puede salir más barato que pedir un préstamo en una entidad financiera, aunque ello dependerá casi exclusivamente del importe del descuento que le ofrezcan si financia.
Si eligen financiar en el concesionario, a ser posible pidan el capital y plazo mínimos exigidos para beneficiarse del descuento.
Verifique todos los conceptos que se incluyen dentro de la cuota (comisión de apertura, servicios accesorios, etc.) y pregunte si hay que pagar alguna cantidad adicional.
Cuando consigan ahorrar algo de dinero, amorticen anticipadamente. Para evitar problemas, hágalo una vez transcurrida la permanencia.
Al terminar de pagar la financiación en el concesionario no olviden solicitar el certificado de saldo cero, necesario para cancelar la reserva de dominio.