Zambon, compañía farmacéutica internacional, líder en la salud y el bienestar cotidiano de las personas, presenta el Estudio Epidemiológico sobre la Tolerancia al Dolor con el objetivo de dar a conocer los dolores leves y moderados más frecuentes en España, la tolerancia y los tratamientos que se utilizan para paliarlos. La rapidez en el efecto y la duración son las características más valoradas en los tratamientos para aliviar el dolor. Los vascos, los que menos se quejan y los de Madrid los que más, mientras que los andaluces son los que más utilizan el dolor como excusa, según los propios encuestados. Según el estudio el 76% de la población ha sufrido algún tipo dolor leve y moderado en los últimos seis meses, especialmente dolor muscular y lumbar, que afecta a un 60%, y dolor de cabeza, que padece el 48%. Los madrileños son los que padecen más dolores de cabeza y los gallegos los que más sufren dolores musculares y lumbares. Más de la mitad de la población sufre cambios de humor y dificultades para realizar las tareas cotidianas como consecuencia del dolor. El 76% de los españoles sufre dolores leves y moderados. Más del 85% de las mujeres creen que son ellas las que soportan mejor los dolores, y el 50% de los hombres comparten esa opinión. El dolor leve y moderado es uno de los padecimientos más frecuentes en la población y, dependiendo del tipo de dolor y de su intensidad, éste puede restar calidad de vida a la población, interfiriendo en sus actividades cotidianas.
Más de la mitad de los entrevistados, afirma que los cambios de humor y la dificultad para llevar a cabo actividades diarias son las principales consecuencias a las que tienen que enfrentarse, seguido de un decaimiento general, irritabilidad y estrés. En este sentido, un 22% de la población asegura que no acude a trabajar a causa de los dolores leves y moderados. Un problema que afecta por igual a hombres y mujeres y que se intensifica en Andalucía, con un 32%, seguido de Cataluña y Madrid. Las comunidades menos afectadas son Galicia y el País Vasco, donde el índice de absentismo laboral se sitúa por debajo del 18%. Los tratamientos con analgésicos son los grandes aliados para aliviar el dolor leve y moderado, especialmente el ibuprofeno, utilizado por 1 de cada 2 encuestados, seguido del paracetamol y el ácido acetilsalicílico.
Más de la mitad de los españoles solicita su tratamiento para el dolor en la farmacia por principio activo, frente a un 34 % que lo hace por marca y un 14 % que pide directamente lo recetado por el médico. Sin embargo, al ser preguntados por la marca más utilizada, los encuestados nombran a Espidifen como la primera dentro de la categoría de los ibuprofenos, y la cuarta más mencionada tras Gelocatil, Aspirina y Nolotil. La característica más valorada en el tratamiento es la rapidez en hacer efecto, con un 84%, seguida de la duración, con un 80%, además de la financiación del medicamento por el Sistema Nacional de Salud o el formato en el que se presenta. Así, un 74% de la población se muestra predispuesta a cambiar su medicamento habitual por otro que alivie antes su dolor y le ofrezca mayor rapidez en hacer efecto.
Según Georgia Rodríguez, Responsable del Área de Dolor de Zambon, laboratorio que comercializa Espidifen, “el Ibuprofeno arginina es el principio activo que mejor se adapta a los requerimientos de la población para combatir los dolores leves y moderados. La arginina triplica la velocidad de absorción del ibuprofeno, de forma que el tiempo necesario para alcanzar la concentración máxima de ibuprofeno se reduce a 21 minutos cuando se toma ibuprofeno arginina, frente a los 60 minutos cuando se toma ibuprofeno solo.”
3 de cada 4 encuestados aseguran tener una alta tolerancia al dolor, aunque el umbral de tolerancia y resistencia es más elevado en las mujeres, según el 70% de los entrevistados.
Por regiones, los catalanes y los vascos se perciben a sí mismos como los que mejor resistencia tienen al dolor. Por el contrario, los madrileños se perciben como los que menos tolerancia tienen ante una dolencia leve o moderada. Pero al margen de la intensidad del dolor y el umbral de tolerancia el 20% de los encuestados, reconoce que utiliza el dolor como excusa y pretexto recurrente para evitar actividades no deseadas.
En este sentido, las situaciones más utilizadas son no asistir a una cita, un 50 %; a una comida familiar, con un 32%; seguido de mantener relaciones sexuales, o hacer un examen. Los hombres suelen emplear más el dolor como excusa, un 22%, sobre todo con dolores de tipo muscular y lumbar. Mientras que las mujeres recurren por igual a dolores de cabeza o musculares, y destacan por ser las que más lo emplean como excusa a la hora de mantener relaciones sexuales, en un 32% frente al 17% de los hombres. Por distribución geográfica, los andaluces utilizan más el dolor como excusa -23%-, seguido de los vascos y de los madrileños -. Los que menos lo utilizan como recurso son los gallegos.
Los españoles no se caracterizan por quejarse o comunicar habitualmente a otros sus dolencias, aunque los datos varían mucho según la Comunidad Autónoma. En este sentido, Madrid es la región que más se queja con un 46% y, en cambio, el País Vasco se caracteriza por tener los habitantes que menos hablan de sus dolores, con un 29%. Los Tipos de dolores de cabeza, que influyen en su estado de ánimo, son provocados como consecuencia de situaciones complejas. La mitad de los entrevistados afirma que el “dolor de cabeza” más importante se lo provocan los problemas familiares y el estrés. La crisis económica y los pagos y facturas son otros de los principales “dolores de cabeza”, según el 30% de los entrevistados; así como los políticos y la suegra, especialmente destacable para los andaluces.
Ficha técnica
• Ámbito: Nacional
• Universo: Población mayor de 18 años residente en las Comunidades Autónomas de Cataluña, Madrid, País Vasco, Andalucía y Galicia.
• Tipo de entrevista: Entrevista Telefónica Sistema CATI (Computer Assisted Telephone Interview)
• Muestra: 500 casos.
• Trabajo de campo: Entre diciembre de 2011 y enero de 2012.
• Control de Calidad: de acuerdo a la Norma ISO 20252 y el código de conducta ICC/ESOMAR