La campaña da a conocer el regalo de estas navidades para combatir la desigualdad a través de la felicitación de Navidad de “Locas del Coño” con motivo del estreno de su canal de YouTube. De manera totalmente orgánica, el video ha conseguido más de 1.000.000 de visualizaciones (entre Facebook y YouTube) y se ha posicionado en el puesto número 3 en videos del momento de YouTube.
Navidad es la época ideal para disfrutar de toda la familia junta, en torno a la mesa. Pero hay alguien que siempre falta: nuestra madre. Pero, ¿por qué tiene que ser siempre ella? Sea por lo que sea, nos gustaría acabar con esta tradición y poder disfrutar de ellas. Y como sabemos que la única forma de mantener a una madre sentada, sería amarrándola a la silla… La revista feminista colaborativa digital, Locas del Coño, de la mano de Shackleton, ha creado el Sentador de Madres, una innovación tecnológica que garantiza madres presentes durante toda la cena navideña.
Con el objetivo de estrenar y dar a conocer su canal de YouTube, Locas del Coño, ha lanzado el Sentador de Madres, una ingeniosa critica al rol de la mujer y, en especial, a la desigualdad de género durante la cena de Navidad. Santi García, Director Creativo de Shackleton, ha declarado: “Esperemos que esta idea ayude esta navidad a acabar con este micro-machismo que en el fondo no tiene nada de micro”.
En tan sólo unas horas y de manera totalmente orgánica, el video ha conseguido más de 1.000.000 de visualizaciones (entre Facebook y YouTube) y se ha posicionado en el puesto número 3 en videos del momento de YouTube. Del mismo modo, el canal oficial de Locas de Madres ha conseguido 2.736 suscriptores.
El invento del Sentador de Madre, consiste en un cinturón de nylon con auto-lock de tres dígitos para que sólo ella decida cuando levantarse. Incorpora un sistema velcrum ajustable a cualquier tipo de silla y, sólo esta Navidad, incluye un Palo-Brindis para poder desear lo mejor, sin moverse de su sitio.
Lidia Infante, Editora y Co-fundadora de Locas del Coño: “Las mujeres de nuestra familia hacen un trabajo invisible que damos totalmente por sentado. Cuesta dejar el rol de cuidadora, porque lo tenemos muy arraigado. El Sentador de Madres es muy necesario”.