En el informe, realizado entre septiembre de 2013 y enero de 2014, FACUA analiza la situación del suministro eléctrico en diez países de los cuales ocho forman parte de la Unión Europea (Chipre, España, Estonia, Francia, Grecia, Hungría, Italia y Portugal) y los otros dos, Albania y Serbia, como potenciales candidatos. Excepto estos dos últimos y Hungría, los demás forman parte de la zona euro.Se trata de la primera iniciativa de colaboración conjunta propuesta por FACUA a nivel europeo, con la que la asociación trata de arrojar luz sobre un sector tan importante como desconocido para muchos de los consumidores del continente.
Entre otros aspectos, el estudio establece una comparativa de tarifas según el precio regulado del kilovatio por hora (kWh) consumido. Así, el precio del kWh regulado en España, con 0,124985 euros por kWh al momento de la realización de la encuesta (siempre sin impuestos incluidos), resulta un 48,2% más caro que el de la tarifa regulada más barata analizada, los 0,06475 euros de media de Hungría. Otra de las tarifas reguladas más económicas es la de Albania, con un precio medio de 0,075398 euros por kWh. Sólo Portugal (0,1405 euros/kWh) y Chipre (0,225 euros/kWh de media) disponen del kWh regulado más caro que en España.
Seis de los diez países participantes en este estudio han aportado datos comparativos sobre las ofertas existentes en el mercado libre de suministro eléctrico. El precio medio del kWh en el mercado libre de España (0,139141 euros) es un 68,3% más caro que en Estonia, el país con el precio medio del kWh libre más económico de los países comparados, con 0,044117 euros. España es, además, el país con el precio medio del kWh en el mercado libre más caro de los analizados. A España le sigue de cerca Portugal (0,137383 euros de media), dos países en los que, a pesar de que los consumidores pueden optar de forma generalizada por la tarifa regulada por sus gobiernos o por el mercado libre, las tarifas medias para esta última opción resultan más caras que las protegidas. Además de Estonia, entre los países con el precio medio del kWh más barato de los analizados están Francia, con 0,086533 euros por kWh, y Grecia, con 0,088 euros.
Cuatro de los diez países analizados cuentan con el imperativo legal para las compañías eléctricas de habilitar un teléfono de atención al cliente gratuito (Estonia, Grecia, Italia y Serbia). En el resto no existe tal obligación, salvo en la comunidad autónoma de Cataluña, donde la ley autonómica sí establece este requisito para las compañías. FACUA ha constatado una gran disparidad regulatoria entre los países analizados en materia de suministro eléctrico, pero también elementos que comparten una cierta semejanza. Y ello a pesar de que, para los ocho países analizados que forman parte de la UE, resulta de aplicación la Directiva 2009/72/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 13 de julio de 2009 sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad.
Las mayores diferencias detectadas por FACUA se producen a la hora de establecer las condiciones para que los hogares puedan acogerse a la tarifa regulada por los Gobiernos de los nueve países que cuentan con precios regulados (todos excepto Estonia), donde no existe ninguna pauta común. En Albania, Chipre y Serbia, además, se da la circunstancia de que sólo existe un suministrador de electricidad.
Con el objetivo de promover las relaciones y la unidad de acción entre las organizaciones de consumidores del continente, la asociación ha impulsado esta iniciativa en colaboración con otros miembros de la organización Codaction-Consumers’ Democracy in Action, en la que está integrada FACUA, y con la de otras asociaciones.Además de FACUA, las asociaciones que han participado en el estudio son Shoqata e Mbrojtjes se Konsumatorit Shqiptar (de Albania), AFOC-Association Force Ouvrière Consommateurs (Francia), Movimento Difesa del Cittadino (Italia) y Centra Potrošaca Srbije-CEPS (Serbia), con las que FACUA mantiene convenio de colaboración; Cyprus Consumers’ Association (Chipre), TARTU Tarbijanoustamis-ja Infokeskus (Estonia), EPKAS Consumers’ Protection Union of Serres (Grecia), Fogyasztói és Betegjogi Érderkvédelmi Szövetség (Hungría), estas cuatro miembros de Codaction, y la Associaçao Portuguesa de Direito do Consumo (Portugal).