Se tarta de la tv movie que narra la titánica lucha de Vicente Ferrer por transformar el desértico paisaje de Anantapur en tierra fértil, y por convertir a la casta de los dálits en ciudadanos de pleno derecho en un país donde siempre fueron considerados intocables. Agustín Crespi dirige esta película para televisión rodada en la India. Carles Canut, José María Pou y Alba Flores completan el reparto. El Teatro Victoria Eugenia ha acogido hoy el estreno con la presencia de sus principales protagonistas, así como del presidente de RTVE, Leopoldo González-Echenique, el director de TVE, Ignacio Corrales, y el responsable de Cine y Ficción de TVE, Fernando López-Puig.’Vicente Ferrer’ cuenta parte de la vida de un hombre que eligió la acción como método para cambiar el mundo. Su determinación devolvió la dignidad a los más desfavorecidos en la casta de los dálits o intocables y transformó la tierra desahuciada de Anantapur, un distrito desértico de la India, en un paisaje fértil y productivo.
En su presentación, Ignacio Corrales ha destacado que la cinta es «una muestra del firme compromiso de TVE con el cine español. Una película especial sobre una persona muy especial». De Vicente Ferrer ha hablado Imanol Arias. Según el actor, «harían falta 3 ó 4 películas para acercarnos a su enorme figura». «Nunca me había enfrentado con tanta humildad a la grandeza de un personaje», ha explicado sobre alguien «que decidió vivir y trabajar para los intocables, y morir entre ellos». De alguien que, según Arias, «descubrió que la obra buena es clave para cambiar el mundo».
Vicente Ferrer está producida por TVE y Grupo Ganga y cuenta con la participación de TV3 y Visiona tv. La película, de 106 minutos de duración, cuenta con el apoyo de la Fundación Vicente Ferrer. Aunque recorre toda una vida, se centra en los últimos treinta años de Vicente Ferrer para narrar su batalla contra enemigos que, de entrada, parecen imbatibles. La historia comienza con su regreso a la India en 1969, después de un exilio obligado a España, donde Ferrer había sido expulsado tras provocar la ira de sectores dirigentes que habían visto en él una seria amenaza para sus intereses personales.
A sus cincuenta años, acompañado por un reducidísimo grupo de fieles colaboradores -entre los que se encuentra Anne Perry, su futura esposa y socia principal de su incierta empresa- el carismático personaje vuelve en silencio, casi de puntillas, a un país que sentía como suyo.
